La estrategia con la que el Real Madrid podría haber ganado el partido ante el Partizan
El segundo partido del playoff de cuartos de final de la Euroliga entre el Real Madrid y el Partizan de Belgrado, que se disputó este jueves, acabó con una brutal y multitudinaria pelea cuando restaban menos de dos minutos por disputar.
Aunque pueda parecer que el partido se suspendió por ese grave incidente, lo cierto es que también atendía a razones reglamentarias. Tal y como comunicó la Euroliga, «cuando se aplicaron descalificaciones para aquellos jugadores que participaron en el altercado y aquellos expulsados automáticamente por abandonar el área de banca, ninguno de los equipos tenía el mínimo requerido de dos jugadores cada uno requerido para terminar el juego, por lo que el juego se considera oficialmente terminado con el marcador en ese momento».
Según esa razón, en el banquillo de ambos equipos había menos de los dos jugadores requeridos por normativa. Por lo tanto, para que no se suspendiese y siguiesen con opciones a remontar el encuentro, el Real Madrid podría haber tirado de paciencia, lógica y estrategia.
Tal y como ha comentado en AStv Fer Ruiz, especialista de baloncesto, hubiese sido tan fácil como que Chus Mateo, entrenador del Real Madrid, le ordenase a cualquiera de sus jugadores que se quedara o metiese en la zona del banquillo.
De esa forma, cabría la posibilidad de que el 1.40 que restaba del encuentro se hubiera disputado, aunque con la tensión pertinente tras la pelea, y dejaba con opciones al club blanco de acercarse a sus rivales.
El segundo partido del playoff de cuartos de final de la Euroliga entre el Real Madrid y el Partizan de Belgrado, que se disputó este jueves, acabó con una brutal y multitudinaria pelea cuando restaban menos de dos minutos por disputar.
Aunque pueda parecer que el partido se suspendió por ese grave incidente, lo cierto es que también atendía a razones reglamentarias. Tal y como comunicó la Euroliga, «cuando se aplicaron descalificaciones para aquellos jugadores que participaron en el altercado y aquellos expulsados automáticamente por abandonar el área de banca, ninguno de los equipos tenía el mínimo requerido de dos jugadores cada uno requerido para terminar el juego, por lo que el juego se considera oficialmente terminado con el marcador en ese momento».
Según esa razón, en el banquillo de ambos equipos había menos de los dos jugadores requeridos por normativa. Por lo tanto, para que no se suspendiese y siguiesen con opciones a remontar el encuentro, el Real Madrid podría haber tirado de paciencia, lógica y estrategia.
Tal y como ha comentado en AStv Fer Ruiz, especialista de baloncesto, hubiese sido tan fácil como que Chus Mateo, entrenador del Real Madrid, le ordenase a cualquiera de sus jugadores que se quedara o metiese en la zona del banquillo.
De esa forma, cabría la posibilidad de que el 1.40 que restaba del encuentro se hubiera disputado, aunque con la tensión pertinente tras la pelea, y dejaba con opciones al club blanco de acercarse a sus rivales.